La segunda fue que el chico que me atendió cuando le pregunté por un libro de autoaprendizaje de catalán que no encontraba debía de ser un profesor de catalán en paro o algo que me ayudó a elegir dos fantásticos libros de autoaprendizaje de catalán, sabiendo muy bien de lo que hablaba. Y además a muy buen precio con eso de la feria.
Y de complemento me compré otro libro de Mercè Rodoreda (aprovechando que es su año): Mirall Trencat (Espejo roto).
Así que ahora ya no tengo excusa para no aprender catalán a mi ritmo.
Por otra parte Manuel y yo nos debatimos desde hace días con una web que tiene algo que queremos desde hace mucho pero que se niega a darnos. Qué rabia.
Que bien lo de los libros!! Que es eso que quereis y se niegan a daros???
ResponderEliminarEs una cosa mítica Brontë para una noche de martes. Ya lo explicaré cuando lo veamos. Lo mejor de todo es que hace un rato lo hemos conseguido por fin :D
ResponderEliminar