martes, 11 de diciembre de 2012

Pequeña gran manualidad navideña


Con esto de estar desconectada del blog (muy a mi pesar, insisto, porque llega un punto que ya parece dejadez), no puedo citar fuentes originales, pero estoy segura de que alguna vez habré hablado de lo negada que soy para las manualidades. Una anécdota que seguro he contado es que he intentado aprender a tejer mil veces y nunca, en ninguna de ellas, he obtenido ni tan siquiera un punto como resultado.

Pero claro, una se abre cuenta en Pinterest, y se cree que las mil y una manualidades que por allí circulan (por no hablar de los tropecientos mil trucos de limpieza, orden y apaños que hay; cada vez que hago partícipe a Manuel de uno de ellos ya siempre dice: "no me lo digas: Pinterest, ¿verdad?") quedan a su alcance. Por suerte o por desgracia, la ambición desbocada dura un tiempo limitado, pero - entonces sí que por suerte seguro - hay pequeños proyectos que quedan al alcance de cualquiera, incluso para mí.

Así que un buen día, buscando manualidades/pasatiempos navideños para niños de la edad de Héctor, me topé con un árbol de Navidad de fieltro donde se afirmaba que no hacían falta más que fieltro, tijeras y el niño en cuestión, porque el fieltro se pegaba al fieltro y los adornitos se sujetaban en lo verde sin más. Incrédula que es una, pensé que como a mí eso no me funcionaría (tengo lo de ser gafe muy interiorizado), siempre se podía poner velcro adhesivo.

Así que comencé por la parte fácil y en la que el viento ambicioso siempre sigue soplando a favor todavía: hacerse con lo necesario. Feliz de la vida fui a la mercería, compré el fieltro verde por metros y lo demás por laminitas y allí lo dejé un tiempo, mientras pensaba en lo bien que iba a quedar pero nunca llegaba a ponerme manos a la obra.

Hasta que me puse a ello y descubrí que lo de las siluetas era divertido. Al principio quise buscar patrones para las campanas, etc, pero no fui capaz de encontrar ninguno a mi gusto así que tuve que - glups - confiar en mi capacidad de diseño (ya sé que es una tontería para alguien que sabe dibujar mínimamente bien, pero para mí es toda una proeza, de ahí la grandilocuencia). Y, mira, para el resultado que esperaba, creo que no me quedaron mal del todo y como mínimo se reconoce lo que pretenden representar.

En la víspera del 1 de diciembre y en su habitación le monté a Héctor un pequeño rinconcito navideño con el calendario de Adviento (en que cada día sale un imán con una figura del nacimiento que va poniendo en el frigorífico) y el nacimiento de figuritas de tela. El árbol de fieltro lo reservé para el cuarto de estar.

A la mañana siguiente enseguida notó la novedad (como para que se le escape algo a este niño) y, como yo había dejado puestos los adornitos, lo que más le gustó ese día fue que yo los ponía y él daba golpetazos para tirarlos a lo bestia. pero después se reformó y ahora se entretiene largo y tendido con el árbol. Parece una tontería, pero es así. La bolsita de tela con los adornos está colgada del pomo de la puerta, la coge y me la trae entusiasmado para que se las vaya dando una a una, diciéndole qué es y de qué color es cada cosa. Y así hemos llegado a pasar hora y pico, que con un niño que no llega a año y medio es todo un récord.




Así que estoy muy orgullosa de mi creación (grandilocuencia desmedida de nuevo, lo sé) porque me gusta cómo ha quedado, pero sobre todo estoy encantada de que haya servido para el fin verdadero, que es que Héctor juegue con ello y se lo pase bien.

A falta de poner el árbol y el nacimiento "de verdad" y hacer las grandes listas de la compra de las comilonas, vamos entrando en el modo navideño desde aquel día poco a poco, con música navideña, luces de Navidad en las calles, comprando turrones, comprando el tió (que no teníamos, salvo uno minúsculo) en la Fira de Santa Llúcia para que Héctor aporree en Nochebuena, etc. Ayer completamos con el té de Navidad (que hacía dos años que no probaba y me supo a gloria), hoy con el kilo de polvorones y el CD de música navideña que han enviado mis padres. Y, dentro de un rato, cuando Héctor se despierte de la siesta, escapada a la biblioteca a ver si hay algún libro/CD con más música navideña para niños.

14 comentarios:

  1. ¡Qué pasada! Las campanillas y los ángeles se reconocen perfectamente (ahora me dirás que era otra cosa XD).

    Ha quedado genial y la idea me encanta, qué bien que a Héctor también le guste. Para que luego digan que es complicado entretener a los pequeños.

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  2. ¡Sí! Has acertado :D Y que me lo digas tú que dibujas tan bien me alegra mucho. Muchas gracias.

    Sí, ha habido suerte. A pesar de hacerlo con ilusión, no las tenía todas conmigo de que le fuera a sacar partido, pero sí, las horas jugadas ya superan con creces a las horas invertidas en hacerlo.

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    1. Jajaja, ¡pero si se nota perfectamente que lo son! El año que viene te veo planeando el nacimiento DIY completo.

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  3. ¡Mira qué buena idea!!! Comprendo que se entretenga mucho con ello. Va a disfrutar mucho con todas las novedades navideñas.

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  4. Pues os ha quedado genial!!!yo tb soy muy fan de Pinterest y de hecho tengo una carpeta q se titula "vacaciones" y básicamente está llena de manualidades facilonas para hacer con los enanos ;)

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  5. Felicidades por el árbol!!! me consuela leer que no soy la única enferma de Pinterest...;D

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  6. Pinterest es mi perdición
    Te ha quedado un árbol estupendo, en resultado visual y práctico porque lo bueno es lo útil que es para Héctor. Me encanta
    Besos
    Emma

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  7. Cristina, muchas felicidades. Yo me adentré con pavor a las manualidades, pero con paciencia y práctica se consiguen cosas muy resultonas.
    Eso sí, pinterest es un infierno de adictivo!!! :)

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  8. Enhorabuena por ese árbol y complementos tan resultones y entretenidos para Héctor, que por cierto, está enorme! Ya es todo un hombretón, jeje!
    Con lo que a mi me gustan las manualidades y aún no conozco Pinterest... cuando tenga tiempo tendré que visitarlo y perderme un poquito.
    Besos.

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  9. Pues me agrada que te animes con las manualidades. Lo bueno de tener hijos es que te inspiran y te animan a hacer cosas de las que antes creías que no eras capaz. En estas cosas todo es empezar, así como haces repostería, también puedes hacer esto. Además te quedó muy bien, Héctor parece muy curioso, yo creo que a él también le gustó.
    A seguir creando.
    Besos.

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  10. Te ha quedado un árbol estupendo y si encima entretiene a Héctor mejor que mejor. Lo de Pinterest no lo acabo de ver, tengo cuenta hace mucho y la aplicación para el ipad es muy chula pero no le acabó de encontrar utilidad, tendré que insistir ;)

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  11. Muy chulo el árbol y si Héctor está entretenido un rato pues tanto que mejor. Y aprovecho para daros unas muy buenas Felices fiestas.

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  12. Hola!!
    Cuando he visto la primera foto me he imaginado un árbol pequeñito pero luego he visto que es enorme!!! ¿De verdad el fieltro se pega entre sí?
    Tomo nota para la próxima Navidad.
    Un abrazo muy grande!!

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  13. Precioso el árbol de fieltro!! Y veo a Héctor tan mayor!! Y a la vez tan pequeño!!
    Ya nos dirá, qué piensa de los polvorones y del té de Navidad...
    Un abrazo y que paséis felices Navidad...llena de momentos de ternura, y muchas risas...(creo que esto último estará garantizado con Héctor).

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