Me veo obligada a confesar que la esperada saga a uno de mis libros preferidos, Cold Comfort Farm (La hija de Robert Poste), Conference at Cold Comfort Farm (Flora Poste* y los artistas), de Stella Gibbons, me decepcionó hasta tal punto que las últimas cincuenta o incluso más páginas fueron sometidas a la típica lectura rápida de "quiero quitarme este libro de encima ya pero voy a hojear las últimas páginas por si mejora un poco y/o pasa algo relevante al final".
Lo empecé con mucha ilusión. Eran muchos años barajando la posibilidad de comprarlo de segunda mano para saciar la curiosidad y qué alegría me llevé hace un par de años cuando Vintage empezó a reeditar la bibliografía de Stella Gibbons (Nightingale Wood, por ejemplo) y vi que este estaba incluido.
Al empezar a leerlo ya entendí la razón de que el éxito de Cold Comfort Farm no venga seguido del hecho de que esta segunda parte (eso me pasa por hablar de las segundas partes) fuera fácil de encontrar antes de haberse reeditado: es un libro muy, muy, MUY fechado. Fechado hasta el punto de que fuera de su contexto y por más que uno quiera ponerle interés y tratar de situarse en el tiempo, no tiene ninguna relevancia a día de hoy. En Cold Comfort Farm, Stella Gibbons ya se mofaba de algunas corrientes artísticas y literarias del momento pero la broma llegaba más o menos hasta nuestros días. En este, pese a entenderse el trasfondo y ver a qué se está refiriendo, la broma se pierde (al menos en mi caso) y Conference at Cold Comfort Farm se vuelve una novela tediosa, con parodias sin gracia alguna y unos Starkadders de marcado acento que ni siquiera merece la pena desentrañar porque entenderles o no aporta lo mismo a la historia: nada, porque es predecible y bastante aburrida.
Me gustaría salvarlo por algún lado. Lo intenté mientras luchaba por leerlo, pero no pude. Un gran chasco. Por suerte tengo más libros rescatados de Stella Gibbons que leer e incluso Christmas at Cold Comfort Farm, que pese a la decepción con este me animaré a leer alguna Navidad, que espero que estén más a la altura de lo que conozco y me gusta de Stella Gibbons.
*Aunque en realidad en este libro ya no se llama así, sino Flora Fairford.
Últimas novedades
Hace 5 días
Justo este Día del Libro me hice con La hija de Robert Poste, de segunda mano. Me estoy conteniendo para saborearla porque he leído muy buenas críticas y todo el mundo afirma que es divertidísima.
ResponderEliminarEs una pena el chasco que te has llevado con esta continuación de la saga :S A veces pasa. De hecho, casi siempre suelo llevarme una desilusión con alguna de las obras que más ansío. Espero que me guste la primera obra con la que me hago de Stella Gibbons!
Un bsito!
Oh, qué maravilla leer Cold Comfort Farm por primera vez. Espero que esté a la altura, que a veces cuando las expectativas son muy altas, pasa lo que pasa. ¡Ya contarás!
ResponderEliminarDejé un comentario aquí...lo prometo...
ResponderEliminarOdio cuando pasa esto, pero es muy probable que no haya metido la contraseña. A veces me ha pasado.
Stella Gibbons me descubrío un mundo maravilloso. Su granja y Flora siempre me han animado en las noches fresquitas de un verano. Pero aún no he conocido a los artistas. Les tengo en casa, en la vitrina...Leyendote, creo que demoraré un poco más ese encuentro. El de Navidad estoy deseando leerlo. Me lo trajeron los reyes dos veces y tuve que cambiarlo por otro (imagina, fue como un vale para comprar otro libro...). Ese espero leerlo en estas futuras navidades.
Un beso grande y que tengas un feliz día. Hoy parece que será muy british