domingo, 11 de enero de 2009

Bundt

No es que hayamos acabado con el surtido de dulces navideños (y sin ir más lejos yo escribo esta entrada bebiendo - aún - una taza de té de Navidad), pero, igual que las series y cosas así, nuestros sábados de repostería ya han empezado lo que podría llamarse la segunda temporada.

Y no es precisamente la falta de recetas que poder hacer enteras y verdaderas lo que nos llevó a elegir uno de los "preparados" que nos trajimos de la tienda Taste of America (que también vende por internet), sino más bien un armario demasiado lleno al que ayer aliviamos un poco al sacar la caja de la Vanilla Bean Bundt Cake (gracias a ella me enteré de que Nordic Ware, los fabricantes de la mezcla, que en realidad se especializan en moldes y similares (algunos espectaculares), fueron los que inventaron el mode para tarta con agujero en el centro y que, por eso, toda tarta agujereada en inglés se llama "bundt cake", sea de lo que sea), la nuestra, como el nombre indica, era de vainilla y fue facilísima de hacer. Ponía en la caja que también ese podía servir en madalenas pero al final optamos por lo tradicional. En la caja también venía una minireceta para hacer, si así se quería, un glaseado para echar por encima. No sé qué fue lo que salió mal o si es que tuvimos poca paciencia con el azúcar, pero al final no nos gustó mucho el resultado - que era lo más empalagoso del mundo - y optamos por un poquito de azúcar glas. Y creo que, como se ve en la foto, la pinta no quedó nada mala.

Después de cenar la probamos, más que por verdadera hambre por salir de dudas, y hmmmm... estaba riquísima (como la mayoría de las cosas de vainilla, por otra parte, que esta tarta tiene hasta las pintitas negras típicas). Eso sí, es contundente (y casi mejor así, porque está tan buena que te la comerías de una sentada si pudieras), así que a estas horas, después del desayuno y el inevitable postre aún queda más o menos la mitad, que no está mal.

A pesar de eso no hemos podido perdonar, a la hora del aperitivo, las aceitunas que faltaban en el domingo de plancha y película clásica. Hoy, cortesía cómo no de la única lectora hemos visto Holiday (Vivir para gozar), con Cary Grant y Katherine Hepburn. Me ha gustado mucho y he comprobado que el acento de Cate Blanchett en The Aviator (El Aviador) cuando hacía de Katherine Hepburn no era tan exagerado como parecía sino que era bastante parecido al original. ¿Pero qué manera de hablar tan rara era esa? (Aunque me ha dado la impresión que al de la Katherine real te acabas acostumbrando y el de la Katherine imitada siempre era un poco cargante).

Y ahora, después de tanto hablar de la tarta, creo que me voy a cortar un trocito, que me he puesto los dientes largos a mí misma.

7 comentarios:

  1. Me encantan las películas de Katharine Hepburn. Y el bizcocho tiene una pinta buenísima!!! Me voy a cenar pues. ;)

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  2. Pues si no has visto Vivir para gozar te la recomiendo, Elvira.

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  3. Sí que la he visto, pero hay tantas de ella que me gustan: La fiera de mi niña, por ejemplo. Y más, pero soy malísima para recordar los títulos. :)

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  4. Nooo, no puedes hacerme esto, justo cuando estoy a punto de desayunar los restos de que hay por mi casa y vas tu y nos presentas este maravilla!!

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  5. Qué me vas a contar a mí. Ayer nos lo terminamos y verlo entero otra vez en el blog está siendo una tortura.

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  6. ¡Felicidades, Cristina! Vaya pinta que tiene el bundt, y que interesante la información que aportas sobre el origen de la forma y el molde. Me ha encantado. Vuestros sábados de repostería son ya míticos!

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  7. Pues sí, a mí la historia del molde también me pareció muy curiosa. Qué bien que te haya gustado la pinta que tenía :)

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