domingo, 8 de febrero de 2009

Scones con clotted cream

Cuando estuvimos en Madrid por Reyes hicimos el combinado obligatorio Living in London-Pasajes. De Living in London nos llevamos unas cuantas cosas, entre ellas una mezcla para hacer scones. Más que nada por probarla, porque nosotros ya "dominábamos" el arte de los scones desde antes.

Así que ayer, consciente o insconscientemente, optamos por hacerlos por fin con la idea de gastar de una vez la clotted cream que me llamaba a gritos cada vez que abría el frigorífico desde que la traje de otra combinación Living in London-Pasajes de octubre. Que ya son meses gritando la pobre. Digo consciente o inconscientemente porque el desayuno de hoy ha sido auténticamente inglés, ¿preparación para Londres? (Aunque en Inglaterra yo, por contundente que sea, no perdono el típico English breakfast). Y es que hoy ya podemos decir que "este fin de semana no, el siguiente, estaremos en Londres".

El preparado de Greens Cakes (marca que tiene muchos más productos a los que habrá que estar atentos en Londres) se hace rapidísimo y es tan fácil como abrir, mezclar y hornear. La pega que tenía era que sólo salían 6 scones según el paquete y si la idea era gastar el botecito de clotted cream de una vez (ya repondremos en Londres, aunque para emergencias siempre están Living in London en Madrid o The Food Hall en internet), porque una vez abierto la nata sólo se conserva tres días, seis scones eran más bien poca cosa. Así que tuve que desenterrar corriendo la receta casera de los scones para hacer otra tanda (y ya de paso comparar) a pesar de las protestas de Manuel que, por lo visto, no está a favor de repetir recetas, ni aunque estén buenísimas.

Con las prisas de la segunda tanda de scones tuve un pequeño percance y fue que en lugar de añadir los 2/3 de vaso de leche agria recomendados añadí... todo el vaso, hasta la última gota. Claro, en lugar de una masa salió algo semisólido/semilíquido que hubo que poner en los moldes a cucharadas. Luego vino el rato "telehorno" en que yo veía que pasaban los veinte minutos que se suponía que tenían que estar en el horno y no se hacían. Y es que ayer estábamos especialmente atontados porque luego resultó que el horno sólo tenía la luz encendida, pero no estaba en marcha (sin comentarios).

A pesar de la leche agria extra no salió tan mal la tanda casera que, en vez de quedarnos con la forma "rocosa" de los scones de la tanda "preparada" anterior y de los primeros scones que hicimos en septiembre quedaron tipo tartaletas, pero con buena pinta. Probamos uno de cada y decidimos que, pese a no estar nada mal los de Greens Cakes, los nuestros eran mejor pese al error. Hoy, en cambio, hemos descubierto que para tomar con la clotted cream los de Green Cakes son mejores por aquello de la consistencia (consistencia, quiero dejar claro, que nuestros primeros scones también tuvieron; lo de ayer fue un despiste puntual).

Todo esto para decir que esta mañana hemos desayunado que daba gusto, hemos acabado llenísimos, habiendo tomado la combinación perfecta que son los scones y la clotted cream y sabiendo además que quedan más de la mitad de los scones (salieron en las dos tandas un total de 19 scones) y bastante clotted cream. Hmmmm.

Y pasado un rato prudencial hemos dejado paso a la plancha, las aceitunas y una de las películas de domingo que más me han gustado (y eso que por el momento todas me han gustado mucho): Easy Living (Una chica afortunada). De una chica a la que le cae un abrigo de visón en la cabeza cuando va a su trabajo en Nueva York en un autobús dedos pisos descapotable y que, pese al jaleo que eso conlleva, no sale nada mal parada.

Y con eso... creo que me voy a ir a merendar. El qué creo que queda claro.

15 comentarios:

  1. Pues tienen una pinta buenisima. Y la clotted cream tampien esta muy buena, asi que ha debido de ser un desayuno riquisimo en general.

    Habeis visto Sucedio una Noche?? Os la recomiendo.

    ResponderEliminar
  2. Ah, y, por si acaso no puedo volver a escribirte hasta entonces, pasadlo muy bien en Londres. Me dais muchisima envidia. Hay unos dulces, una especie de maltesers rellenos de diferentes cosas que van en paquetes naranjas creo, de los que todavia me acuerdo. Si puedes pruebalos!! Y si vas a venir a Madrid pronto comprame una caja... Jeje! Un beso!

    ResponderEliminar
  3. Tus scones tienen muy buena pinta, pero la clotted cream se me indigesta sólo de verla... aunque seguro que es buenísima. Sigo envidiando tu metabolismo :-)

    ResponderEliminar
  4. Creo que sin más dilación (ya son tres veces, creo que los nombras), tengo que ponerme a ello!! No tengo muy buen horno en casa, pero chica...me voy a arriesgar...Espero que pronto veas una entrada con ellos (aunque no sé si me saldrán tan apetecibles como los tuyos)
    La nata del Living no es muy espesa?? Me la recomiendas o mejor otras natas??

    Por cierto, la peli, creo que no la he visto...¿te gustó?

    ResponderEliminar
  5. Francamente, no hay nada tan deleitoso como unos apetecibles scones en una tarde fría y lluviosa, y una tacita de té. Todos mis cariños, Au revoir!

    ResponderEliminar
  6. B: apuntamos Sucedió una noche. Según dice Manuel "hay tantas...".

    Elvira: créeme, en serio, mi metabolismo no debería darte nada de envidia. Ufff, siento lo de la clotted cream, porque si no puedes con la mantequilla, no quiero ni pensar con esto.

    María: son tan fáciles que ni te enterarás, ya verás. Eso sí, son adictivos, así que haz unos cuantos. La clotted cream de Living in London es la única que he encontrado a la venta aquí (aunque hace poco vi que en The Food Hall tenían otra marca). El problema es que los ingleses son tanto de natas, tienen tantísimas, que es probable que, como aquí por ejemplo con la mantequilla, cada fabricante sea un mundo. Esta de Living in London desde luego no está nada mal.

    La película MUY recomendable.

    El Caballero: tienes toda la razón.

    ResponderEliminar
  7. ¡Hola! Vengo desde Salzburgo dando un paseíto por Montreal ;). Sólo quería comentar que mi clotted cream del domingo era igualica a la tuya :)
    Me ha hecho mucha gracia que coincidimos en varias cosas como el gusto por lo británico, el cine y lo del tele-horno, que yo practico mucho.
    Pásalo muy bien en Londres (jo, qué envidia)

    ResponderEliminar
  8. Qué gracia lo de las coincidencias, me ha encantado lo de coincidir en lo de telehorno.

    Que no te dé envidia Londres, porque Salzburgo tampoco debe de estar nada mal :)

    ResponderEliminar
  9. Oh, clotted cream, que me da el telele, vengo siguiendo las miguitas del enlace a mi blog.
    Una pregunta, ¿Clotted cream que dura meses??? ¿Está pasteurizada? As far as I remember, suele durar días (pocos). Es más, sin saber el propósito/duración del viaje a Londres, llevad una neverita portátil para traer bien de clotted cream ;) y de Ale, y de queso del güeno güeno... salud!

    ResponderEliminar
  10. Gracias por la visita y el comentario, Ibán.

    Pues la verdad es que no tenía ni idea, pero agrandé la foto para ver la etiqueta y vi que efectivamente es pasteurizada. La verdad, desconocía que las otras no lo fueran.

    Y sí, la clotted cream ya está apuntada en la lista de la compra londinense :D

    ResponderEliminar
  11. Claro, ya me extrañaba a mí.
    Pues, ahora que vas, píllate de la fresca y verás qué diferencia. Es, básicamente como la leche o los yogures o la nata fresca o la UHT...como del huevo a la castaña, o como de querer a amar ;)
    Una marca que encuentras por todos lados (y que toman en palacio) es Rhodda's, pero hay muchas más; pero asegúrate de coger la que tenga la fecha de caducidad más lejana, porque se pasa en seguida, Cheers!!!!!!

    ResponderEliminar
  12. Mañana voy a Madrid, y espero que me de tiempo a pasar por "Living..." comprar la nata, saborear un té y un pastel de allí...¡¡qué me encanta!! (me fijaré en la carta para decírte cual y cambiar impresiones) y también pasaré por la tienda de al lado...ummm!! Sólo de pensarlo y viendo tu post y siendo las horas que son...se me hace la boca agua.

    ResponderEliminar
  13. Ibán: la fresca sí que la he probado antes en Inglaterra, aunque sin saber que era "especial" por ser fresca (como el otro día no sabía que esta era pasteurizada) y, la verdad, no noté gran diferencia (mi paladar, si está rico, no hace más distinciones :P) pero tendré en cuenta tu recomendación para hacer la prueba con conocimiento de causa. Muchas gracias.

    María: ¡qué envidia! Aunque yo al final siempre que voy pensando en probar una de sus tartas acabo en lo de siempre. Chelsea, creo que se llama. Un estupendo surtido de dulces de té ingleses, con sus scones y sus sandwiches de pepino entre otras cosas. Llena muchísimo (es para compartir) pero está riquísimo también.

    ResponderEliminar
  14. Nunca he comido scones y me apetece muchísimo. Me apuntaré la primera receta a ver qué tal... por cierto a mí también me pasó lo del horno y el otro día en el trabajo me quejé toda la tarde que no funcionaba la pantalla y resultó que estaba desenchufada... :S

    ResponderEliminar
  15. Pues son muy, muy fáciles, ya verás. Y la verdad es que luego merecen la pena. Anímate.

    ResponderEliminar