lunes, 13 de julio de 2009

Don't Tell Alfred (No se lo digas a Alfred), de Nancy Mitford

El reencuentro con Nancy Mitford, como era de esperar, ha sido de lo más agradable. ¿Cómo no querer volver a un mundo en el que las visitas al Ritz, las fiestas al más alto nivel y el acento inglés de clase alta están a la orden del día y además - lo mejor de todo - vistos con un gran sentido del humor?

También una maravilla es que Fanny - ahora Lady Wincham - a pesar de tener mucha más experiencia que, con toda seguridad, la gran mayoría de sus lectores en ese campo, siga sintiéndose de lo más insegura y tambalenándose a la mínima. Y encima sus hijos no sólo no colaboran en facilitarle las cosas en su tarea de "señora embajadora" en París, sino que se esmeran en complicárselas aun más de las formas más inverosímiles.

Nancy Mitford tiene un don especial para conservar y mantenernos informados de qué ha sido de los personajes a los que es imposible no acabar adorando, pero sorprende aun más su capacidad de crear nuevos personajes que resultan igual de adorables. En este caso el personaje estrella es Northey, sobrina segunda de Fanny, que llega a París con la misión de ejercer de secretaria personal de Fanny y termina... bueno, termina haciendo cualquier cosa menos eso. Y lo más chocante de todo es que en lugar de resultar insoportable por escaquearse con tal facilidad, le resulta al lector igual de adorable que a los personajes que la rodean y que son incapaces de "ponerla en su lugar".

También me ha gustado mucho el tratamiento - y todo lo que le rodea - de David, el hijo mayor de Fanny (Molinos: definitivamente tienes que leerlo, te encantará y asentirás constantemente), que es un divertidísimo hippie al que se le va la fuerza por la boca. Otro de los hijos, Basil, se dedica a llevar a pobres turistas británicos a la Costa Brava de vacaciones (se habla mucho de España en el libro en general, casi más que de París a veces) y está hecho todo un teddy boy. Los dos hijos pequeños (uno adoptado, Fabrice, hijo de Linda) no se quedan detrás y también montan de las suyas. Así que la pobre Fanny, con la complicidad de Northey, que tampoco se priva a la hora de crear conflictos diplomáticos por las razones más pintorescas, y Philip, un trabajador de la embajada, se pasan los días diciendo "no se lo digas a Alfred", el señor embajador, que ya tiene bastante - aunque mucho menos - con lo suyo.

Me resulta imposible elegir mi libro favorito de los tres de la "saga", pero lo que me ha gustado especialmente de este es lo realista y lo moderno que resulta en muchas de las ideas que hay detrás. Yo sigo defendiendo que puede que sean libro de risa, pero eso no quita que sean libros vacíos de contenido: todos tienen su mensaje más o menos profundo. De este me quedo con muchas de las actitudes y las críticas a ciertas cosas, que no están nada desfasadas a día de hoy; quizá por eso, ya digo que sin poder elegir, sí que este me ha parecido el más moderno y actual (y se desarrolla en la década de los cincuenta).

La traducción de Milena Busquets en la edición de Libros del Asteroide, después de intentar pillarla en cosas muy difíciles de traducir a lo largo de todo el libro es también destacable, al menos en la impresión que una se puede hacer leyendo trozos de vez en cuando.

Y los Valhubert me han hecho gracia también, así que desde ya estoy deseando leer The Blessing (La bendición) aunque dejaré pasar un tiempo, para poder saborear la novedad más tiempo.

Conclusión: Nancy Mitford, tan recomendable como siempre y haciendo guiños a sus libros anteriores:

The publishers know they can sell any amount of books about France--in fact France, like Love, is a certain winner on a title-page.
Los editores sabe que todos los libros sobre Francia venden...De hecho, la palabra "Francia" y la palabra "amor" son un cebo infalible en una cubierta. (Traducción de Milena Busquets)

Por supuesto, con la excepción de The Blessing (La bendición) y de este mismo, los libros anteriores de Nancy Mitford se llaman In the Pursuit of Love (A la caza del amor) y Love in a Cold Climate (Amor en clima frío).

6 comentarios:

  1. Sin dudarlo, lo anoto para próximas compras de libros!! Gracias por la recomendación :)

    ResponderEliminar
  2. Y me puedo leer este sin leerme los dos anteriores?? Ya supongo que no habra una ley que lo prohiba, digo que si te pierdes algo, a parte de, estoy segura, dos estupendas novelas...

    ResponderEliminar
  3. María: eso, eso. Te gustará.

    B: pueeeeees... yo creo que sí. A lo mejor con alguna mención no tienes ni idea de qué te está hablando y desde luego te enterarás de algunas cosas que han pasado en los anteriores, pero yo creo que sí que se puede leer solo. De hecho: léelo, léelo.

    ResponderEliminar
  4. Arrrgggg, qué ganas tengo de comprármelo para devorarlo, pero no puedo por si me cae en mi cumple. ¡Qué tortura!

    ResponderEliminar
  5. Yo acabo de terminar "Amor en clima frío" que lo tenía pendiente y, aunque al principio me ha costado un poco ( hechaba de menos al tío gruñón), luego me lo he leído volando...

    ResponderEliminar
  6. Iris: ¡conozco esa sensación! Aguanta, que luego la recompensa merece la pena :)

    Maelstrom: Es que A la caza del amor es tan bueno y empieza tan rápido y tan al grano que luego cualquier libro parece un poco lento. Pero Amor en clima frío en cuanto coge velocidad... Anímate con este, te gustará también.

    ResponderEliminar