miércoles, 1 de octubre de 2008

Sus habitaciones propias

Hace tiempo que sigo con interés una sección del periódico inglés Guardian: Writers' Rooms es la dosis ideal de cotilleo y fisgoneo en las vidas de escritores que me pueden gustar más o menos, de los que puedo haber leído todas sus obras o ninguna, pero cuyas habitaciones siempre me llaman la atención. Es como una revista de decoración literaria.

Una foto de la habitación donde escriben acompañada por un textos suyo que describe por qué la tienen como la tienen, qué les gusta, qué les inspira (en caso de que el autor esté vivo aún. Si el autor ya murió el texto es de algún entendido).

Esta de la foto es la de Margaret Forster, que me gusta mucho, con ese algo que hace que sea inconfundiblemente inglesa. Como se ve no hay ni ordenador ni máquina de escribir: Margaret Forster sigue escribiendo de su puño y letra todos y cada uno de sus libros. Y lo que se ve a la izquierda de la mesa, en el suelo, son todos sus manuscritos.

Pero hay muchas más que me gusta mirar una y otra vez: el cuarto de estar de las Brontë, que por visto que lo tenga tanto en foto como al natural siempre me hipnotiza, la mesita donde Jane Austen escribía a hurtadillas, pendiente del peldaño que crujía y la bisagra que rechinaba, la habitación de Penelope Lively, sin escritorio puesto que escribe con su vieja máquina de escribir en el regazo, el caos tan cercano y mucho más mundanal de la biógrafa Claire Tomalin. Y, por supuesto, no podía faltar, la habitación propia de Virginia Woolf, que más que habitación era una pequeña cabaña propia (Daphne du Maurier, que no aparece ¿aún? también escribía en una cabañita del jardín de Menabilly (Manderley, en Rebecca)), que en la foto aparece ordenada pero, según dijo alguien que la vio en vida de Virginia Woolf, no debía de ser muy diferente de la de Claire Tomalin.

Y muchas más, ninguna tiene desperdicio.

5 comentarios:

  1. Pero qué entrada más bonita!! Me encantan las habitaciones propias!! Trabajo con mujeres y niños y siempre que llegan...las enseño su "habitación propia"...esa donde puedan perderse y encontrarse...me encanta la habitación propia de Margaret...y cada una por las que nos haces viajar...Brontë, Austen, Woolf...me encantan!! Y me traen recuerdos ummm!! ^^

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  2. Ya lo dijo Virginia Woolf. Me alegra que te haya gustado la entrada :)

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  3. Yo también estoy siguiendo los reportajes, me gusta mucho el poder ver el lugar de trabajo de los escritores, conocer cuales son sus manías al escribir...

    Secundo a María en que has escrito una entrada muy interesante ;)

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  4. precioso el post, e increíbles las fotos!!

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  5. Yo también soy una curiosa de los espacios de trabajo de los escritores y sus rutinas. Hemingway solía escribir sus cuentos en los cafés parisinos y creo que J. K . Rowling empezó escribiendo la saga de Harry Poter en un cafetería también.

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